jueves, 12 de febrero de 2015

Un vistazo a la sociedad a través de la lengua el mito y la leyenda

Escrito por:
Mario Daniel Alfonso Caltenco Velazquez

Hombre y lenguaje. Lenguaje y hombre. No es posible hablar de uno sin la presencia del otro. A través del lenguaje el hombre logra capturar el pensamiento, la acción, sentimientos de seres actuales como también de los de distintas épocas. Con él se comunica y puede hablar. Históricamente el hombre fue capaz de hablar a partir de un momento de iluminación (si así se le puede llamar) en que discriminó los sonidos y los aplicó primero a determinados objetos de su entorno y posteriormente a ideas cada ves más abstractas y subjetivas que brotaban de sentimientos y vivencias que formaban parte del bagaje de experiencias que le ocurrían y de las cuales era sujeto y objeto.  Esto ocurrió dentro de un contexto social en el que el hombre interactuaba ya que como ente social no puede vivir aislado.  

Son en la actualidad alrededor de unas seis mil quinientas las lenguas que se hablan en nuestro mundo. De ellas, solamente veinticinco pueden considerarse importantes por su extensión y por su producción escrita.

La pregunta que ha preocupado siempre a pensadores y lingüistas es inmediata: ¿De dónde surgió tal diversidad? ¿Cuál fue el origen de todas las lenguas?


El Lenguaje: medio de comunicación entre los seres humanos a través de signos orales y escritos que poseen un significado. En un sentido más amplio, es cualquier procedimiento que sirve para comunicarse.

Una de las mayores interrogantes que se plantean los que estudian temas comunes a la lingüística es el origen del lenguaje humano. Hasta la fecha se han sucedido distintas hipótesis que tratan de arrojar algo de luz a esta pregunta pero, por desgracia, la respuesta definitiva aún no ha sido hallada... En esta parte del trabajo nos referiremos a las Teorías o Hipótesis que existen del origen del Lenguaje de forma breve, para hacernos una idea más global del tema.

Se ha supuesto, que los hombres empezaron por imitar los sonidos que oían en los animales, o a lanzar gritos emocionales instintivos o cantos de sincronización al trabajar en equipo, más o menos como los remeros del Volga, y todo esto dio origen al lenguaje.

El uso del lenguaje comprende varios aspectos de la comunicación humana mediante lenguas naturales. Estos aspectos engloban desde la interpretación semántica o significado social de la oraciones en ciertos contextos lingüísticos, tratado por la pragmática; hasta los aspectos sociolingüísticos, pasando por los aspectos de política lingüística como la estandarización y de los usos normativos de una lengua.  Por ello en toda cultura suele establecerse un consenso mínimo para establecer cuál es el modelo más prestigioso o el patrón más digno de imitar por todos, cuando se usa una lengua.


Engels, en su "Dialéctica de la naturaleza" dice: "... los hombres en formación llegaron a un punto en que tuvieron necesidad de decirse algo los unos a los otros. La necesidad creó el órgano. La laringe poco desarrollada del mono se fue transformando... mientras los órganos de la boca aprendían a pronunciar un sonido tras otro."
Y esto es, en definitiva, lo que se acepta hoy. “Mayoritariamente” se cree, se escribe y se enseña que de los gruñidos han surgido las modernas gramáticas; de lo simple lo complejo y de lo primitivo lo civilizado.

Asimismo, existe el pensamiento de que hubo primera una única lengua y que todas las demás son sus derivados. Esta teoría la propuso el filósofo alemán Gottfried Wilhelm Leibniz en el siglo XVIII, y se conoce como “monogénesis”. Mientras tanto, “poligénesis” es el nombre que recibe la teoría contraria a la de Leibniz. Tampoco hay respuesta aún a esta pregunta.


En primer lugar, notemos que los lenguajes escritos más antiguos que nos han llegado suelen ser los más difíciles y complicados. Es de todos conocido que el griego clásico es más difícil que el griego moderno; el latín mas que el castellano, el francés o el inglés, y el chino antiguo mucho más que el chino moderno. Incluso, si comparamos. los más antiguos entre sí, resulta que el griego clásico, anterior 600 años al latín, era más complicado que éste, y si nos remontamos al Sánscrito Veda (1.500 a.C.) la dificultad es increíblemente superior, ya que, por ejemplo, cada verbo poseía 500 partes (compárese con el ingles, en él que cada verbo solo posee 5 partes). ¿Qué nos viene a decir este hecho?


Pensemos un momento... si la teoría de la evolución fuera verdad en todo ambitos, deberíamos esperar que las lenguas antiguas fuesen mas simples que las modernas, ya que -según la teoría- de los simple se evoluciona a lo complejo. Pero esto no es lo que podemos observar, sino más bien todo lo contrario.

Si estudiamos detenidamente las lenguas modernas podemos observar una creciente degeneración de las lenguas primitivas, una simplificación a partir de un idioma complicado.


Por todo esto definir un concepto tan antiguo  como lo qué es un mito (del griego, muthos) no es, desde luego, tarea fácil. Una definición entregada por la Real Academia de la Lengua, señala que el mito es una “narración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. Con frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.” Y agrega que es una “Historia ficticia o personaje literario o artístico que condensa alguna realidad humana de significación universal”.

A partir de esta definición, podemos agregar que los mitos son relatos que cuentan cómo se crearon los cielos, de dónde provienen los vientos o cómo nacen los propios dioses; los mitos nos transportan a un tiempo sagrado distinto al nuestro, más abierto a los hombres como su propio horizonte.


La relación entre los mitos y los diversos tipos de literatura, sea ésta oral o escrita, al igual que los propios mitos, que podemos encontrarlos tanto por escrito, como por vía de la tradición oral, es sumamente detallada, a juzgar por la gran variedad de autores que han tratado abundantemente la cuestión (hasta el punto de que, en el plano de los estudios mitológicos, las relaciones entre cuentos y mitos han llegado a constituir una suerte de tópico ineludible, que hace hincapié en la importancia fundamental de esa distinción para poder arribar a una comprensión plena del carácter propio de los mitos.

La neta demarcación que establece el estudio  Bronisław Kasper Malinowski (quien fue el refundador de la antropología social británica a partir de su renovación metodológica basada en la experiencia personal del trabajo de campo y en la consideración funcional de la cultura). Nos permite comprender con mayor facilidad el resto de  las clasificaciones que ofrecen otros autores, así como los posicionamientos que adoptan unos y otros respecto del tema a tratar, esto es, las diferencias y afinidades entre los mitos y otros tipos de relatos.


Tal como se desprende del trabajo de campo de nuestro presente autor, los trobriandeses distinguen entre al menos tres tipos de narraciones: los  cuentos, las  leyendas, sagas y narraciones históricas y los  mitos. La primera clasificación comprende aquellos relatos ficcionales cuya principal finalidad es meramente recreativa, estas son narraciones consideradas fantasiosas, destinadas al solaz y esparcimiento de los oyentes. En términos del propio Malinowski, este tipo de relatos, son asimilables a lo que en nuestra cultura calificamos usualmente como "cuentos populares" o "cuentos maravillosos"

En un sentido mas coloquial se dice que las leyendas son cuentos o historias que se inventaban en un intento de dar explicación a aquellos fenómenos que no comprendían, o también historias que contaban para entretener y divertirse, o incluso meter miedo a los niños pequeños!

Sin embargo, no todos los mitos tienen por qué tener este propósito explicativo. Igualmente, la mayoría de los mitos están relacionados con una fuerza natural o una deidad, pero muchos son simplemente historias y leyendas que se han ido transmitiendo oralmente de generación en generación.

¿Pero? ¿Por qué interesarnos hoy en la mitología? Más allá de lo literario, lo estético o incluso, su aspecto lúdico, la mitología es una herramienta simbólica, una alegoría universal sin fecha de vencimiento.


Así pues, muchas historias mitológicas pueden ser un interesante punto de partida para abordar temáticas como la educación en valores, el autoconocimiento o las relaciones sociales, porque pueden promover climas de reflexión en los ámbitos más diversos.

A su vez la poesía épica narra las hazañas de héroes. Los protagonistas de los relatos épicos personifican ideales guerreros y su destino se presenta ligado al de su pueblo.
Según  C. G. Jung. El arquetipo del héroe representaría uno de los arquetipos principales de lo inconsciente colectivo en la psicología analítica 

Ya Aristóteles señalaba en su Poética que la imitación podía hacerse de tres maneras: pintando a los personajes mejores de lo que son en la realidad, pintándolos como son en la realidad o haciéndolos aparecer como peores de lo que sonAl tomar como referencia a los seres humanos para indicar las cualidades de los personajes, Aristóteles estaba ofreciendo un modelo de conducta para los espectadores o lectores. Ante los mejores es necesario admirarse, ante los iguales reconocerse y ante los peores precaverse.

En principio la épica se transmitía oralmente y cumplía una doble función social; por una parte informaba a un público que no sabía leer sobre sucesos gloriosos de su historia; por otra parte, proponía un modelo de héroe a la colectividad, un héroe que encarnaba las virtudes guerreras y caballerescas.

En sus orígenes, la épica se relaciona con las narraciones de mitos o relatos cosmogónicos que explican el nacimiento del mundo. Un subgénero de la épica es la epopeya, aquellos relatos en los que los dioses adquieren gran protagonismo, es el caso, p.e. de los relato griegos de Homero. En la Edad Media, la épica alcanzó u gran desarrollo con los Cantares de gesta (el castellano Cantar de Mío Cid , el alemán Cantar de los Nibelungos, y la francesa Canción de Roldán) y las narraciones caballerescas sobre el rey Arturo y los caballeros de la Tabla Redonda.

En la épica los protagonistas son seres humanos, que son héroes por sus hazañas, pero no son dioses. Sus hazañas son importantes para el destino de su pueblo y se relacionan con hechos que pueden ser históricos o legendarios, pero que son considerados verídicos por la colectividad a quien va destinada.

Por ejemplo: Entre el quinto y el tercer milenio a.C. la Península Balcánica estuvo dominada por pueblos marítimos procedentes de Asia. En el segundo milenio a.C., los aqueos, un pueblo guerrero de origen indoeuropeo, comenzaron a extenderse en la península, al igual que los dorios y el resto de pueblos, atraídos por sus condiciones topográficas.

Todos estos pueblos antecesores, dejarán influencias muy beneficiosas para el desarrollo del mundo griego, por tanto, se puede decir que de la mezcla de de poblaciones de épocas y orígenes diferentes había llegado a formarse el pueblo griego.

Durante el primer milenio antes de nuestra era, los habitantes de Grecia no formaban un único estado, aunque mantenían un sentimiento de unión y fraternidad entre ellos, considerándose a sí mismos un solo pueblo. Las consecuencias de este sentimiento fueron, por ejemplo, el habla de una única lengua, el griego, aunque presentando numerosos dialectos; también compartían las mismas creencias y adoraban a los mismos dioses.

Zeus era el dios principal y tenía autoridad sobre el resto de dioses y diosas. Los más importantes dioses residían en el Monte Olimpo, tenían especto humano y, aunque eran inmortales, tenían cualidades y debilidades humanas.
Además pensaban que los dioses podían tener relación con los humanos, e incluso descendencia, que son los semidioses y los héroes a quienes también adoraban.
Los griegos también creían en criaturas fantásticas como los centauros (unos caballos con cabeza, brazos y busto humanos), cíclopes (monstruos de un solo ojo), arpías, esfinges,…. que a menudo aparecían en sus relatos.


Estos dioses, héroes y criaturas legendarias son los responsables de que la cultura griega tuviera una infinidad de mitos, que son historias también fantásticas, habitualmente de tema religioso. El conjunto de ellos es la mitología que intentaban explicar el origen del mundo, de las divinidades y de los héroes más famosos.

La mitología griega es una de las más ricas que jamás se hayan producido como lo demuestran sus monumentos y demás manifestaciones artísticas, así como, una tradición literaria que tendrá muchas influencias de Homero que recogió muchos de los mitos griegos en sus libros.

Si bien la taxonomía de Van Gennep añade una categoría más a la división trobriandesa reseñada por Malinowski  (a saber, la fábula, la cual está de alguna manera emparentada con el cuento), esta aportación resulta significativa, en tanto que nos posibilita hacer referencia a una cuestión que Lévi-Strauss considera central y representativa de la "lógica de lo concreto" que él atribuye al denominado "pensamiento salvaje": la animalización de lo humano y la hominización de lo animal (antropomorfismo de la naturaleza y fisiomorfismo del hombre). 

En la fábula, encontramos tres elementos que le son peculiares: la producción en verso, la hominización de los animales y la presencia de una moraleja final. Debemos tener en cuenta que la alusión de propiedades animales atribuidas a los seres humanos y viceversa (propiedades humanas atribuidas a los animales), constituye una suerte de constante en el imaginario griego antiguo que posibilita tanto la representación de vicios y virtudes humanas (que son simbolizadas en los animales y aceptadas de común acuerdo por os oyentes), como la difusión de moralejas y normas morales más o menos explícitas.


Si revisamos las cuatro funciones tradicionales de la mitología, encontraremos que en gran parte se han desvanecido. Esta es, al menos, la mirada que propone Joseph Campbell, en su Mitología Creativa.

La función religiosa es, sin duda, la primera de las funciones de una mitología viva. Lo cual significa, en términos prácticos, que tenga la capacidad implícita de generar temor (en el sentido del respeto) y humildad.

Pero lo cierto es que debido a esta nueva magia conocida como ciencia la teología, en términos actuales, no puede aspirar a ser más que uno simple ejercicio literario. Los textos arcaicos, en rigor, solo pueden comprenderse a la luz del contexto histórico que les daba sentido, un universo en el cual sus héroes, hazañas y sentencias resultaban infalibles.


Ya no buscamos la imagen del universo en los Textos Sagrados arcaicos, puesto que es la ciencia la que nos provee este tipo de respuestas. ¿Cómo ha llegado la ciencia a sustituir paulatinamente el pensamiento mítico que ha dominado la mente de la humanidad por siglos y siglos? Un breve recorrido por la historia de la ciencia, nos llevará a repasar una serie de revoluciones relevantes que fueron separando a lo mitológico de su función creadora de cosmogonías.

Por eso, mientras que en la Edad Media, las Sagradas Escrituras eran las depositarias de toda fe, la misma fe, tomó a la Razón como destino durante la Ilustración. ¿Esa fe incondicional está depositada hoy en día en la ciencia? Probablemente, la confianza en que la ciencia puede protegernos ante la inmensidad de todo lo que aún no sabemos, es la característica más notable de nuestro tiempo. La ciencia, reemplaza al mito en su función metafísica y mística, presentándose como objeto de culto y como placebo frente a lo misterioso.

“El paraíso, está aislado del mundo habitable por montañas o mares, o por alguna región tórrida, que no se puede cruzar. Por eso, quienes han escrito sobre topografía, no lo mencionan” Santo Tomás de Aquino

Hacia 800 a.C. Beda el venerable había sugerido que el Paraíso podría no ser un lugar físico sino un sitio espiritual. Esta idea, sin embargo, fue rechazada primero por San Agustin, y más tarde por SantoTomás quién hacia el 1300 habría intentado argumentar razonablemente respecto a la existencia física del Paraíso el cual no solo existiría sino que alguna vez habría de ser descubierto.

Y así, de acuerdo a la cosmovisión dominante durante la Edad MediaDantehabía colocado el Paraíso en la cima del Purgatorio. No se trataba pues, de una metáfora, sino de una elaboración mítica que describían el modo en que los hombres medievales entendían físicamente el mundo en el que vivían. En efecto, cuando Colón durante su tercer viaje, pasó entre la isla Trinidad y tierra firme de Sudamérica, el volumen de agua del Orinoco que desembocaba en el Atlántico, creyó sin vacilaciones que se trataba de uno de los ríos del Paraíso.


Toda superstición es sin lugar a dudas, un concepto relativo porque desde su misma etimología, sugiere creer en algo que pertenece a una visión del pasado. La tierra plana y el sol girando sobre ella es una visión del pasado. No era un superstición en el siglo 8 a.C, sino una explicación que se correspondía con el alcance de la observación empírica por entonces. Y el valor espiritual de esta visión residía en que le otrogaba al hombre la seguridad respecto a la existencia de un sentido al universo: la armonía.

Pero esta armonía comienza a quebrarse cuando Copérnico rescata las teorías heliocentristas de la antigüedad, sugeridas por Aristaco de Samos. Mäs tarde, las investigaciones de Galileo, acabarían por aniquilar simultanemanete el univeso bíbliod como la poesía helenística de la música de las esferas.

En la actualidad, la mirada del universo ya no nos sugiere armonía, sino por el contario conflicto, cambio e inestabilidad. Y no se trata sólo de pensar respecto a la información conocida actualmente por la ciencia, sino también el paradigma ubica al hombre en una relación de inestabilidad respecto al mismo saber científico e incluso, respecto al modo en que la civilización se relaciona con los descubrimientos científicos.


La tercera función de la mitología es la de legitimar y mantener el orden establecido. Pero lo que sucede, en consecuencia, es que el individuo ahora, se encuentra solo. Como diría Nietzche, o todo es falso, o todo está permitido.

Y la última función, la de centrar y armonizar al individuo que generaba de por sí, una entrega absoluta, ya no es posible, porque la mitología a perdido su presencia contenedora en el individuo.

Pero puesto que la simbolización es lo que estructura el significado que  el hombre hace para poderle encontrar sentido a las cosas al momento de construirles un sentido al nombrarlas. No se nos es difícil pensar que el origen sobre el cual el ser humano ah sustentado todo aquello que cree como su propia realidad es a través de la simbolización culturalmente aceptada de los conceptos que constituyen su realidad social.  Ahora usamos palabras para referirnos a las cosas por lo tanto el lenguaje es una de las máximas creaciones del hombre, pues a partir de el puede representar su entorno, sus ideas, sus pensamientos, etc.

Una lengua es algo vivo como la comunidad que la utiliza y varía desarrollando cambios a través del tiempo y espacio, y por esto poetas, filósofos, sociólogos, etc. y en especial la lingüística que estudia el lenguaje en sus dos ramas principales: el habla y la escritura, han buscado en todo el largo camino que ha seguido el lenguaje desde su creación. 


La cohesión de un grupo se da  através de los elementos ideológicos que permite a un grupo realmente unirse, esta puede ser una idea que le otorgue un sentido de pertenencia a un individuo dentro del grupo, por su parte la cultura es el conjunto de valores, creencias y entendimientos importantes que los integrantes de una sociedad tienen en común. La cultura ofrece formas definidas de pensamiento, sentimiento y reacción que guían la toma de decisiones y otras actividades de los participantes en la agrupación.

Las agrupaciones de éxito? al parecer tienen fuertes culturas que atraen, retienen y recompensan a la gente por desempeñar roles y cumplen metas socialmente aceptadas ante su juicio moral.

Esto quiere decir que esas relaciones y metas  son consensuales, percibidas como justas entre los miembros del grupo y los que son gobernados. Demandan el buen desempeño de las autoridades y que esas sean respetadas como  una acción percibida como de interés común.


La cultura a través del tiempo ha sido una mezcla de rasgos y distintivos espirituales y afectivos, que caracterizan a una sociedad o grupo social en un período determinado. Engloba además modos de vida, ceremonias, arte, invenciones, tecnología, sistemas de valores, derechos fundamentales del ser humano, tradiciones y creencias

La cultura es algo que nadie discute y los mitos y las leyendas son tal vez los mejores ejemplos de cómo el ser humano ah utilizado el lenguaje para representar su entorno, sus ideas, sus pensamientos, etc y asi poder darle un significado a estos mismos y a su vez cohesionarse en sociedad.

Si el mito realmente se propaga de forma oral como se ah mencionado con anterioridad, podemos concluir que las ideas se construyen dándoles un significado simbólico el cual se propaga através de la conversación, lo que le daba un significado general para todos cuando este significado era aceptado por todos lo que lo volvía algo común  y por tal motivo en algo de su cultura.

Así pues para formar a un grupo se necesita que este posea una Historia un tiempo compartido que les otorgue una identidad, normas y leyes, lo que desembocara en el sentido de pertenencia del mismo grupo. Y aunque actualmente se considera que los pueblos que se han alejado de esta forma de ver el mundo como pueblos mas civilizados con mayor progreso y por ende mas racionales es asumir  que el progreso y la civilización  como conceptos culturalmente aceptados en nuestra forma de pensamiento.


Y a pesar de todo para que un grupo forme una civilización institucionalmente establecida debe estar formado por personas que culturalmente aceptan  la forma de gobierno sus normas establecidas.

La actividad mental es exclusivamente humana y es el resultado de la interiorización de signos, de la cultura, de los procesos sociales. La cultura se internaliza en forma de un sistema neuropsíquico sobre la base fisiológica del cerebro humano.  La actividad nerviosa superior ha internalizado significados sociales, acumulados en el patrimonio cultural de la humanidad, mediatizados por signos. Este proceso se realiza en el transcurso del desarrollo ONTOGENÉTICO en sociedad, a partir de la actividad social del niño con los adultos, que son los transmisores de la experiencia social

El entendimiento de la cultura, para entender el dilema de individuo y sociedad es  fundamental y en la medida que este punto se desvanece al momento de centrar el objeto de estudio en el individuo y su racionalidad de forma cada vez mas aislada se va disminuyendo la capacidad de explicación. Por lo tanto es fácil suponer que todo aquello que se internaliza de manera simbólica en la cultura personal adquiere un valor y o significado que le permite estructurar su pensamiento y por ende  su conducta  de quien lo adquiere

Y es en el héroe donde se encarnan las virtudes a las que los hombres aspiramos en cada momento de la historia. Entender  la vinculación entre los valores heroicos y los valores sociales es básico para comprender la transformación que se produce al llegar a la época contemporánea. Señalemos un punto de partida: para que aparezca el héroe la sociedad ha de tener un grado de cohesión suficiente como para que existan unos valores reconocidos y comunes. Sin valores no hay héroe; sin valores compartidos, precisando más, no puede existir un personaje que permita la ejemplificación heroica. El héroe es siempre una propuesta, una encarnación de ideales.

Por lo tanto la cultura no se destruye y solo se transforma y se modernizan  prueba de ello es como normalmente mucha gente hoy en día  relaciona a la mitología con culturas antiguas o religiones; no siempre es así.


Por ejemplo, series de televisiónlibros e historietas, y juegos de rol entre otros, que logran formar un universo ficticio propio; adquieren componentes mitológicos muy importantes que incluso a veces pueden llegar a dar lugar a profundos y complicados sistemas filosóficos. 

Un ejemplo excelente de este tipo de mitología es la desarrollada por J. R. R. Tolkien en sus libros El Silmarillion y El Señor de los Anillos, entre otros escritos, a la que él denominó legendarium. Otros ejemplos que se pueden mencionar son los mundos ficticios creados por las novelas de Dragonlance, Las cronicas de Narnia y Harry Potter, la series de televicion Star Trek y Lost, las películas de Star Wars, el manga Naruto, la caricatura Avatar: la leyenda de Aang, o las Franqucias de videojuegos como son Zelda y Fianal Fantasy entre otras.


Algunos críticos opinan que por el hecho de que los personajes principales y los ciclos de historias de las narraciones modernas no sean de dominio público, las leyes sobre derechos de autor impiden a los autores independientes continuar ciclos de historias modernas, evitando que dichas sagas de personajes compartan algunas de las características esenciales de las mitologías; por lo menos, hasta que se cumpla el plazo de derechos de autor y pasen a ser de dominio público. A pesar de eso, los propietarios de los derechos de autor en ocasiones continúan las historias con otros autores, como es el caso de personajes como Tarzán y las novelas de Conan de L. Sprague de Camp, o los cómics de superhéroes, la mayoría de los cuales han tenido docenas de autores.

Al final de cuentas todo aquello que no es irreal pero que en su momento fue considerado como algo real tiene un rasgo de existencia de alguna manera. Ya que los simbolismos son los que estructuran los significados y el proceso de interacción entre individuo-sociedad,  no esta dentro del individuo  o en las instituciones, las sociedades se construyen en la medida que van  haciendo las cosas,  es decir en la medida que sus miembros van adquiriendo una historia y un tiempo compartido del cual creen  normas, leyes y una identidad  que les otorgue un sentido de pertenecía que le permita comprender su entorno.


Porque  amenos que comprendamos al imaginario que compone a la sociedad en términos culturales no se podrá comprender su estructura social ya que en la manera que nos plateamos las cosas es la forma en la que definimos las mismas ya que el grupo genera una ritualidad que le da un sentido de pertenencia y se instituye dentro del mismo, tanto en su forma de pensar como en  su  normatividad.



Todo esto es algo objetivo y a la vez subjetivo que todos llegan a comprender y a su vez se llega a considerar como algo propio y único de cada uno de los miembros del extracto social. Para entender la acción social hay que entender las reglas y estructuras que posee esa sociedad y comenzar por su cultura y los simbolismos en la que esta se ah estructurado nos puede abrir las puertas para comprender el pensamiento de los individuos que la conforman. Y tanto sus mitos y leyendas  como sus héroes pueden ser un excelente punto de partida  para ello.

Bibliografía:
Malinowski, Bronislaw: El Cultivo de la tierra y los ritos agrícolas en las islas Trobriand. Editorial Labor. (1977)

Arnold Van Gennep: La formación de las leyendas (1982)

Claude Lévi-Strauss Antropología estructural: Mito, sociedad, humanidades. México: Ediciones Siglo XXI. (2006)
Manuel Garin Boronat: Mitojuegos.  Ensayo Sobre el héroe y el mito en el imaginario Nintendo – Barcelona (2009)
Jose B.Bergua: Mitología Universal -Madrid (1979)
Martin Sagrera: Mitos y sociedad -Barcelona (1967)
Joseph Campbell: El Héroe de las Mil Caras -Estados Unidos 1949


Y bueno espero les halla gustado este ensayo que escribí ya hace tiempo para una de mis clases de la universidad en lo personal creo que ah sido de mis mejores trabajos y creo que no eh vuelto a escribir algo así de bueno académica mente hablando en una larga temporada, se que  esa habilidad ahí esta pero no me ah llegado la inspiración.

Decidí poner este ensayo aquí ya que esta es la razón de este blog hablar de temas un tanto mas intelectuales pero de forma amigable e interesante aveces hasta cómica que logren interesar a las personas en ver  mas halla de lo evidente.



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